Digamos que...

| viernes, 11 de diciembre de 2009



a veces, ni siquiera tengo tiempo de pensar, me levanto y comienzo a descubrir la cantidad de cosas que tengo que hacer y lo tarde que es, apenas he dormido un par de horas, hago un café por costumbre, en realidad no me apetece, creo que no he dormido o no lo he notado, gran parte del día lo paso sólo, con prisas de un lado a otro... y aveces con la sensación de no hacer nada, tengo prisa, no me apetece tomar café, tenía algo que hacer ahora, no recuerdo, bueno tengo que recoger y despedirme, tengo prisa... aunque siempre voy tranquilo a todos los lados, aveces tardo horas en recordar quién soy y que hago aquí, mientras me entretengo haciendo algo....

0 comentarios: